(Extracto de La conspiración de las lectoras)

Victoria Kent se inscribió en el Colegio Oficial de Abogados de Madrid en 1935. Las otras dos (mujeres) a las que se les permitiría ejercer la abogacía por aquel entonces fueron Clara Campoamor, que inició su carrera un mes después, y Matilde Huici, la única casada, que lo hizo en 1926, también social del Lyceum.

El juicio en defensa de Álvaro de Albornoz -uno de los encausados por la fracasada rebelión republicana de diciembre de 1930 contra la Monarquía- contribuiría de manera especial a la fama y el prestigio de Victoria como abogada. Fue la primera mujer en el mundo que informaba como abogado ante un Tribunal Supremo y lo hacía ante el tribunal militar de máxima jerarquía, el Tribunal Supremo de Guerra y Marina, los días 20 y 21 de marzo de 1931. La prensa se hizo eco de su «brillante actuación»:

Victoria Kent tiene una personalidad acusada, con su ya célebre boina de terciopelo, su impecable traje sastre sus blusas de estilo «camisero», su alta y esbelta figura… físicamente tiene «línea», una línea perfectamente definida; y su vida tiene «línea también.

Ironías del destino

Victoria Kent representó a la España del progreso en el mundo de las prisiones pero, curiosamente, terminó por dimitir porque sus propuestas parecieron excesivamente avanzadas y radicales al ministro de turno, que no era otro que su anteriormente defendido Álvaro de Albornoz.

Sus enfoques y reformas del sistema de prisiones, con especial incidencia en la necesidad de educación del funcionariado, se han mantenido hasta nuestros días, pero ignoro si estas actuaciones también fuero calificadas como brillantes. Habría que saber si además de la personalidad acusada mantuvo también la boina y la esbelta figura.

A modo de Déjà vu

Casi un siglo más tarde, poco han cambiado las cosas. Leyendo lo de la brillantez de la Kent me acordé de cómo describía la revista Elle a Eva Longoria, actriz, modelo y empresaria que, además, desarrolla una intensa actividad en política social Para su campaña Elle la describía así:

La gran diosa latina de Hollywood es la protagonista de la portada de nuestro número del lujo a la venta el día 21 de noviembre. 7.500 piezas de Swarovski cubrieron el cuerpo de Eva Longoria para que la actriz protagonizara el rol más brillante de su carrera: convertirse en mujer de cristal.

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Isabel Iglesias

Experta en análisis estratégico y dinamización de la información. Investigadora de nuevas realidades, alérgica a los tópicos, bloguera... Productora y guionista. Desde 2009 uniendo Cine e Investigación para contar esas nuevas realidades por descubrir como la película Máscaras. En desarrollo dMudanza, componiendo la polifonía de voces de reflexión de la ciudad.

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